Higiene hospitalaria: 5 buenas prácticas que favorecen la salud del paciente

La higiene hospitalaria es uno de los principales factores para garantizar la seguridad, el bienestar y la salud de los pacientes y de los profesionales sanitarios. En un entorno de fácil contaminación y mucho ajetreo, la presión puede dar lugar a errores con grandes consecuencias.

Florence Nightingale, la precursora de la enfermería moderna, también estaría de acuerdo. Cuando Nightingale llegó a los campos de batalla de la guerra de Crimea, conflicto que se desarrolló entre 1853 y 1856 en el sur de Rusia y en los Balcanes, el horror que presenció la llevó a revolucionar los hábitos de higiene hospitalaria. La falta de condiciones sanitarias fue tal que, tan pronto como se implementaron algunas buenas prácticas, la tasa de mortalidad entre los soldados se redujo más del 40%.

Hoy en día, las observaciones de Nightingale siguen rigiendo los procesos de limpieza, higiene y desinfección en clínicas y hospitales. Descubre 5 buenas prácticas de higiene hospitalaria que promueven la salud del paciente y que sin duda estarían 100% aprobadas por Nightingale.

¿Qué es la higiene hospitalaria?

La higiene hospitalaria engloba todas las prácticas y procedimientos que se adoptan en los hospitales y otras instalaciones de atención médica para prevenir la propagación de infecciones y garantizar un entorno seguro y limpio para los pacientes, los profesionales de salud y los visitantes.

Para cumplir con este objetivo, la higiene hospitalaria incluye diversas medidas y protocolos que se implementan para controlar la propagación de patógenos como bacterias, virus, hongos y otros microorganismos. Todos los procedimientos se ejecutan teniendo en cuenta el riesgo de infección en las diferentes unidades, tales como emergencias, quirófanos, unidades de cuidados intensivos, plantas hospitalarias, ambulatorios y áreas administrativas, entre otras.

De este modo, la higiene hospitalaria juega un papel clave para garantizar un espacio sanitario seguro y, en última instancia, proteger la salud pública.

5 buenas prácticas para garantizar la higiene hospitalaria

Algunas de las principales medidas de higiene hospitalaria que deben implementarse y monitorizarse incluyen:

1.     Definición de los procesos de higiene

Un establecimiento sanitario tiene áreas más críticas que otras, pero todas deben ser controladas con especial atención, ya que siempre existe el riesgo de contaminación cruzada. La definición de procesos y un programa de higiene y desinfección permiten evaluar estas áreas de riesgo y adecuar los cuidados y técnicas a seguir, y los materiales a utilizar.

La calidad de los productos para la protección individual del profesional o los equipos de limpieza son puntos esenciales que también deben tenerse en cuenta.

2.     Monitorización de los estándares de calidad

Monitorizar los estándares de calidad permite a hospitales, clínicas y laboratorios tener un mayor control sobre los procesos implementados.

También es posible obtener una certificación de calidad para el establecimiento médico si este cuenta con una estructura física bien conservada, materiales adecuados para la higienización, manuales de procesos, normas de limpieza y recursos humanos especializados en higiene hospitalaria.

3.     Formación adecuada del personal

Para mantener un espacio limpio, esterilizado y preparado para todas las actividades médicas a realizar, es necesario que todos los involucrados estén especializados en los diferentes procesos de higiene, como el lavado de manos, clasificación de residuos, contaminación, contención de brotes o manejo de productos y equipamientos.

Tanto los servicios de limpieza como los profesionales de la salud, e incluso los propios pacientes, deben ser conscientes de la importancia de la higiene y las formas de prevenir la contaminación y la infección, especialmente para los pacientes de riesgo.

4.     Gestión de residuos hospitalarios

Además de posibles agentes contaminantes, los residuos sanitarios también se consideran un riesgo para el medio ambiente. Por este motivo, es necesaria su gestión eficiente, su transporte a centros especializados y su adecuado almacenamiento.

De acuerdo con la legislación vigente en España, los residuos sanitarios deben clasificarse de acuerdo con sus requisitos de gestión, estableciendo parámetros de riesgo para cada material.

5.     Uso de las nuevas tecnologías

Las nuevas tecnologías aportan ventajas para mejorar los procesos de higiene, haciéndolos más eficientes y seguros. Paños con microfibras más eficaces, diferentes fórmulas de desinfectantes líquidos, superficies auto desinfectantes e incluso descontaminación sin contacto son algunos ejemplos de las nuevas tecnologías aplicadas al sector sanitario.

¿Cómo evaluar la higiene hospitalaria?

La evaluación de la higiene hospitalaria se puede realizar a través de diferentes métodos e indicadores. Las formas más comunes de evaluar la higiene hospitalaria incluyen:

1.     Auditorías e inspecciones

La realización de auditorías e inspecciones regulares en las instalaciones hospitalarias es una forma eficaz de evaluar la higiene hospitalaria. Estas evaluaciones pueden ser realizadas por equipos internos de control de infecciones o por agencias reguladoras externas.

Durante las auditorías se comprueban diversos aspectos como la limpieza y desinfección de áreas y equipos, el cumplimiento de los protocolos de higiene, la gestión de residuos y otras normativas sanitarias.

2.     Monitorización de indicadores de infección

La incidencia de infecciones nosocomiales es un indicador importante de la eficacia de las prácticas de higiene. Los hospitales pueden rastrear y analizar datos como tasas de infecciones quirúrgicas, infecciones asociadas a dispositivos médicos o transmisiones de paciente a paciente. El seguimiento de estos indicadores permite identificar áreas de riesgo e implementar las medidas correctivas adecuadas.

3.     Análisis microbiológicos

Realizar análisis microbiológicos de las superficies, los equipamientos y el aire puede ayudar a identificar la presencia de microorganismos patógenos y evaluar la efectividad de los procedimientos de limpieza y desinfección. A través del análisis microbiológico, es posible identificar puntos críticos de contaminación e implementar medidas correctivas.

4.     Observación directa

La observación directa de las prácticas de higiene realizadas por los profesionales de la salud puede proporcionar información valiosa sobre el cumplimiento de los protocolos y las pautas de higiene. Los equipos especialistas pueden realizar observaciones directas en diferentes momentos y lugares dentro del hospital para evaluar, por ejemplo, el uso adecuado de Equipos de Protección Personal, lavado de manos, limpieza de superficies y otras prácticas relevantes.

5.     Feedback de los pacientes

La percepción de los pacientes sobre la limpieza y la higiene en los hospitales puede ser una importante herramienta de evaluación. Los hospitales pueden pedir la opinión de los pacientes tanto sobre la higiene del entorno, los equipamientos y los procedimientos como sobre la calidad general de los servicios. Estos datos pueden proporcionar información valiosa sobre la satisfacción del paciente y ayudar a identificar áreas de mejora.

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Además de ser una solución fácil de integrar en el entorno hospitalario, Multiwasher Healthtech también tiene un consumo de energía muy eficiente durante el lavado y la desinfección, y permite ahorrar agua, detergente y recursos. Esta máquina consigue garantizar la perfecta higiene de los carros de distribución de alimentos para los pacientes, así como de las respectivas bandejas y recipientes. Los carros de transporte genéricos (no vinculados al transporte de instrumental quirúrgico) también pueden lavarse con esta máquina, consiguiendo excelentes resultados.

Esta máquina está diseñada para trabajar con grandes volúmenes a la vez, lo que permite una limpieza eficiente de un gran número de utensilios en un corto periodo de tiempo. Además, MultiWasher opera a las temperaturas adecuadas y con los productos adecuados, algo fundamental para eliminar microorganismos, contribuyendo así a la prevención de infecciones hospitalarias. MultiWasher también ayuda a minimizar el riesgo de contaminación cruzada, ya que incluye sistemas y áreas separadas para realizar el lavado y el secado.

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